Un cadáver en la biblioteca

5 de noviembre de 2009


Por algo es la reina del género negro:el comienzo de la novela tiene la levedad y la gracia de las mejores comedias, el tono justo de humor para ahuyentar el morboso tema que se desarrolla. A pesar, incluso, de que existe una ley no escrita de que jamás se debe contar un sueño en una novela (el lector no se merece que utilicemos los recursos narrativos oníricos en provecho exclusivo de los que escribimos; el lector suele quedar burlado o frustrado al descubrir que es un sueño lo narrado).La señora Bantry sueña y es despertada, no con el tintineo de la porcelana con el primer té del día, sino con la sorprendente y desagradable noticia de que hay un cadáver en el suelo de su biblioteca....Desde luego no hay peor sitio para un cadáver: el pobre ya no puede leer e impide a los otros acceder a los libros, aunque sea por poco tiempo.

Ágatha Christie, "Un cadáver en la biblioteca. El caso de los anónimos".Barcelona, Debolsillo, 2003.

2 comentarios:

Índigo dijo...

Y digo yo, compi, así de pronto me parece que ¿no están presentes las bibliotecas en muchas tramas negras?
Un besito

HLO dijo...

Pues ahora que lo dices, sí. ¿Será porque a muchas personas les parecen siniestras?