Hotel si voy...

11 de septiembre de 2010


De las pocas personas a las que hago caso en sus recomendaciones literarias (mi amiga Eloísa) he tomado esta referencia. Una curiosa pareja de escritores suecos, a los que imagino escribiendo al alimón sus ficciones en las tranquilas noches a tres bajo cero, cuando no hay casi nada mejor que hacer (digo para un matrimonio).
He comprado esta mañana el libro y me propongo disfrutar la novela ya. Pero me pongo a leer y casi me da un ataque de ansiedad por lo mal escrito que está el primer párrafo. Juzguen ustedes mismos: "El día había sido caluroso y bochornoso (a mí me parece que sobra un adjetivo, pero bueno, allá ellos) (...) y con una neblina solar (sic, por favor un meteorólogo profesional me explique qué demonios es esto; yo sólo he estudiado Climatología) (....). El cielo era alto" (bonita frase para un niño de cinco años, aunque tal vez habría que preguntarse si su desarrollo psicolingüístico era el adecuado).
En fin, seguiré leyendo por pura curiosidad (¿estará el disfrute estético completamente proscrito? ésa es la duda a resolver. Otra: ¿será culpa de los traductores? Me temo que no seré capaz de resolverla yo solita).
Si no vuelvo a escribir sobre el matrimonio escriptorio, ya sabrán los lectores de este blog a qué atenerse.

Maj Sjöwall y Per Wahlöö, "Asesinato en el Savoy". Barcelona, RBA, 2010.

5 comentarios:

Enrique Bienzobas dijo...

Querida Herminia. Leo "Novela negra con lunares" a menudo y, normalmente, me siento bastante identificado con lo que ahí se dice. No siempre, claro.
Sin embargo ahora si que me gustaría decir algo referente a ese primer párrafo. Vaya por delante que no he leído la novela que comentas pero que la pareja formada por Sjöwall y Wahlöö, han escrito cosas muy buenas y en bastante menos espacio de lo que ahora acostumbran los suecos (ya sabes, "lo bueno si breve..."). "El día había sido caluroso y bochornoso..." tiene evidentemente una reiteración: el bochorno es el aire caliente del estío (no soy meteorólogo) y caluroso lo podemos entender como ardiente; incluso podríamos entender la figura como un epíteto (como por ejemplo "alas ligeras").
Por otro lado en "El cielo era alto" veo una metáfora: cuando el cielo está alto no pesa, el día puede ser ligero; en cambio, cuando el cielo es bajo (las nubes están bajas), pesa, agobia, el alma puede estar sufriendo, pongamos por ejemplo.
Creo que "Neblina solar", ya digo, no soy meteorólogo, es un juego de palabras en el que se nos comunica algo físico: aludiendo a una niebla ligera y luminosa y se puede aludir también a algo psíquico: un sentir a través del aspecto climático, no en vano hay un libro titulado "Niebla solar" sobre psicología escrito por María Teresa de Vega (creo que nada tiene que ver con otra de igual nombre que mal dirige ministerios).
No obstante todo esto creo que voy a buscar el libro y leerlo. Luego comentamos.

HLO dijo...

Tienes razón, querido Enrique. Es que me ha pillado en la fase correctora y estoy un poco tiquismiquis. Le voy a dar una oportunidad a estos escritores que están considerados como los "padres" de la novel anegra sueca.

danvers dijo...

No he leído todavía esta novela (sexta de las diez que pudieron escribir los autores: una por año, hasta la muerte de él en 1975), aunque ya reposa en nuestras estanterías, de modo que no puedo hablar de las posibles incorrecciones y si son achacables a los autores o al traductor.

Las otras cinco novelas ya editadas en nuestro país, eso sí, son espléndidas. Son muchos los elementos que hacen tan buenos a los "Sjowalloo", pero yo destacaría sobre todo esto:

- La atención que presta a la investigación policial como un trabajo colectivo con mucho de minucioso y rutinario (aunque las novelas son conocidas como serie Martin Beck por su principal personaje, en realidad son novelas corales, en las que tan importantes como Beck son los otros miembros de su equipo de investigación)que no se resuelve a base de geniales deducciones sino por una paciente labor de acopio de información, sostenida más de una vez por el azar y que se desarrolla en un largo periodo de tiempo.

- Su estilo narrativo, sencillo, sin apresuramiento, incluso con cierta apariencia anodina (lo cual tiene por objetivo, precisamente, transmitir los numerosos tiempos muertos que poseen las investigaciones policiales y el carácter nada excepcional de quienes las llevan a cabo: es una magnífica labor de atmósfera dramática, por tanto), acaba envolviendo al lector en una densa trama de reflexiones, que rehuyen siempre tanto la trivialidad como el sensacionalismo o la falsa brillantez.

Recomiendo sobre todo la quinta novela, "El policía que ríe", que fue adaptada por Hollywood en 1975 en una película también estupenda, "San Francisco, ciudad desnuda". (Así descubrí yo a estos autores.).

HLO dijo...

Querido Danvers: para cuándo ese blog de cine o de cine y literatura...Yo te agradezco este estupendo comentario, pero con él tendrías para medio artículo de tu propio blog...

Julio dijo...

Este verano me leí "Asesinato en el Savoy", y me gustó tanto que también me he leido "El hombre que se esfumo", de esta misma pareja, Wahlöö y Sjöwall. Es posible que la traducción no sea de las mejores, pero me gusto su sobriedad, su seriedad, su sencillez ..... Enfín, sobre gustos.... yo me lo pasé muy bien.