Ayer se presentó por fin en Málaga "El códice purpúreo". Juan Gabriel Lama abrió el acto y, a continuación, Guillermo Busutil resaltó las principales características de la novela. Señaló que se trata de una novela histórica en la que se narra la historia de Ávita "una joven virgen fallecida por excesivo ayuno, incluso por lo que sería hoy día la anorexia (...) Un joven muerta a la que un obispo pretende rentabilizar como símbolo religioso". Pero a la vez, subrayó el escritor, esta novela presenta elementoS propios del thriller con otro argumento "centrado en la culpa, en la venganza e incluso en un crimen inducido". El resultado, prosigue Busutil, "es una historia en la que la autora consigue equilbrar, en un mismo plano, lo mundano y lo espiritual, la religión y la investigación, el cuerpo y el alma de esta novela que n les dejará indiferentes".
Después de la brllante intervención de Guillermo Busutil (escritor granadino con ascendientes malteses), hablé sobre las motivacines que me habían llevado escribir esta narración y sobre todo a indagar en un período, en apariencia anodino, pero tremendamente interesante como es el siglo IV d. C.
El público asistente, entre ellos muchos amigos y amigas, realizó luego diversas preguntas e incluso algunas aportaciones muy interesantes, como la de la poetisa Isabel Pérez Montalbán, que apuntó el hecho de que la anorexia nerviosa, como trastorno mental, había existido desde antiguo, no siendo pues algo exclusivo de nuestra época. Cada época, eso sí, tiene unas motivaciones distintas: religiosas en esta época, estéticas en la nuestra.
Guillermo hizo también alguna broma al señalar que la contraportada, con la cita de alguna de las fuentes literarias utilizadas, podría espantar al más pintado. Lo cual me hizo insistir en lo vivos que están estos autores antiguos, cómo sus emociones y sentimientos son como los nuestros, pues si bien la cultura material ha cambiado de un modo formidable, en esencia el ser humano, su plantilla emocional básica, no ha evolucionado prácticamente: seguimos amando, odiando, engañando, buscando el placer y la felicidad como en el siglo IV. Ni más ni menos.
Por no faltar no faltaron ayer ni las violetas que una amiga me regaló y que adornaron la mesa de presentación (gracias de nuevo). Y gracias a todos los asistentes por su presencia y el afecto que me demostraron. Ah, y sé que a muchos les fue imposible asistir por diversas circunstancias; mi saludo a ellos también.
En la fotografía Guillermo Busutil y Herminia Luque en la entrada del Centro Andaluz de las Letras.
Herminia Luque Ortiz, "El códice purpúreo". Sevilla, Paréntesis Editorial, 2011.
Centro Andaluz de las Letras. Málaga, 9 de noviembre de 2011.
Presentación con violetas
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10 de noviembre de 2011
Publicado por HLO en 12:57
Etiquetas: Centro Andaluz de las Letras
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4 comentarios:
Qué bonito acto, Herminia. Que bien acompañada y que placer presentar una nueva obra.
Felicidades de nuevo, querida!!
Un abrazo.
El saludo para los que no pudieron venir es para ti porque la lejanía es un obstáculo bien grande.
Un fuerte abrazo, Laura.
Te felicito y lamento no haber estado allí contigo como me hubiera gustado.
Un beso grande y mucha, mucha, mucha suerte con tu nueva novela.
Gracias, Inma. No te preocupes, la novela siempre estará ahí...
Besote, compi
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