Leo la receta de los arancini en el relato "La Nochevieja de Montalbano" y ya me está dando ardor de estómago. Estarán buenísimas, sin duda, esas bolitas que prepara Adelina para su par de hijos delincuentes y el propio comisario Montalbano para la cena de Nochevieja. Pero no sé si hasta el punto de merecer la pena de que el comisario se involucre en una artimaña de dudosa legalidad. Su conciencia de policía quedará a salvo. Lo que no sé si quedará a salvo es el estómago de "Salvo" Montalbano...(carne guisada con arroz, guisantes y salchichón, todo hecho bolindrones, rebozado en clara de huevo y frito). Salud, como dice Ricardo sive "guapo zaragozano".
Andrea Camilleri, "La Nochevieja de Montalbano".Barcelona, Salamandra, 2008.
Arancini
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20 de octubre de 2009
Publicado por HLO en 14:56
Etiquetas: Montalbano
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2 comentarios:
¡Te aseguro que está buenísimo! Pero no comas de dos que empachan.
Besos.
Si es que no se puede hablar sin haber probado las cosas...bueno, tampoco, porque si no no existiría el 98% de la literatura...
Un besote
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