En todas las vidas hay una porción de vida submarina. Un caudal de vida que discurre por debajo la mirada de los demás. Antes se le llamaba "intimidad". Antes de que esa parte se convirtiera en la porción susceptible de ser visibilizzada en los más diversos formatos de comunicación (antes sólo, y parcialmente, en la literatura). A veces, esa parcela de ocultamiento hace misteriosas a las personas. Aunque no toda persona que parece misteriosa guarda algo de verdad. Así lo expresa Linda ante su padre: "Pues yo no conozco a nadie ten misterioso como tú (...). Durante años creía que escondías algo, pero ya he aprendido que de todos aquellos que parecen misteriosos sólo unos pocos esconden algo de verdad" (pág.35).
Lo interesante, en las novelas como en la vida real, es el desciframiento del misterio, el proceso de desvelar. Cuando todo queda al descubierto puede sobrevenir la decepción(¿eso es todo?). Cuando todo quede al descubierto ojalá no nos hagamos esa pregunta.
Henning Mankell, "El hombre inquieto". Barcelona, Tusquets, 2009.
Vida submarina
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18 de octubre de 2009
Publicado por HLO en 9:22
Etiquetas: Henning Mankell
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2 comentarios:
¡Ya lo has leído! Ay, no sé si quiero saberlo: ¿voy a hacer "esa" pregunta cuando lo lea?
Dime que no, por dios.
Un abrazo.
No necesariamente cuando leas la novela; la novela está bien. Lo digo por la vida en general, lo que es peor todavía, claro. Pero es que estaba de un humor un poco cenizo cuando escribí eso.
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