Testigo de cargo

6 de marzo de 2010

Hace ya tantos años que vi la película que ya no me acuerdo absolutamente de nada; de modo que voy a enfrascarme en el libro sin el referente cinematográfico. O en todo caso con el referente que yo qiuera: una Marlene Dietrich en todo su esplendor (cuando trabajó en el filme de Billy Wilder, la actriz alemana tenía ya la bonita edad de cincuenta y seis).
Con sorpresa compruebo que en realidad "Testigo de cargo" es un relato breve de los nueve que componen el delgado volumen de bolsillo; espero que no me decepcione. Ya os contaré, queridos y selectos lectores. Cuando sea mayor e intensamente rica, me haré encuadernar los libros de Ágatha Christie en piel y oro, y dejaré reposar estos deleznables volúmenes de bolsillo en los que leo a la escritora británica en algún infierno (una segunda fila, un altillo de estantería); ya os contaré también, queridos lectores.


Ágatha Christie, "Testigo de cargo". Barcelona, RBA, 2009.

3 comentarios:

Francisco Ortiz dijo...

Ya no me acuerdo bien de esa película yo tampoco. Cuéntanos, cuéntanos.

danvers dijo...

En efecto, el relato es muy muy breve. No esperes, por tanto, encontrarte el sabroso personaje del abogado encarnado por Charles Laughton (y mucho menos a la entrañable enfermera a la que daba vida su esposa en la siempre menos interesante realidad).

Eso sí, la distancia corta le sentaba a doña Agatha peor que la larga (por cierto, supongo que has leído las novelas, pocas, que protagoniza el matrimonio Beresford, en especial las excelentes "El cuadro" y "La puerta del destino").

HLO dijo...

Pues no, esos no me los he leído (de la treintena que me leí sobre todo hace un par de años); ya me has picado la curiosidad...tendré que leerlos de inmediato.