Juan Luis Vives, en 1524, escribe:
"En la misma parte de España, siendo yo mochacho, tres doncellas ahogaron con un pedazo de lienzo a una su compañera porque la hallaron con un hombre. En Nápoles un caballero ahogó a tres hijas por saber que estaban corruptas...Y si alguno quiere mirar claro y no por tela de cedazo, hallará que las mujeres que no saben guardar su castidad merescen tanto mal que no es bastante el precio de la vida para pagallo".
Esto lo suelta el benemérito humanista en "Instrucción de la mujer cristiana". El Renacimiento, como se ve, pasó de puntillas sobre las mujeres. Por fortuna, hubo después un movimiento ilustrado y de él surgió el feminismo, el movimiento que que luchó por la igualdad de derechos de las mujeres y lo consiguió...en Occidente (y con muchas trabas y muchas rémoras y muchos crímenes por medio también). En Irán subsiste la bárbara pena de lapidación para las mujeres que utilizan apenas los resquicios de una incierta libertad sexual...
Juan Luis VIves, "Instrucción de la mujer cristiana". Madrid, Signo, 1936
Sakineh
Tweetear |
10 de julio de 2010
Publicado por HLO en 21:13
Etiquetas: Feminicidio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
6 comentarios:
Multiculturalidad?
No he visto ni siquiera un leve maniesto en contra.
SALUDOS
Qué multiculturalidad ni qué gaitas...Es decir que si hay gaitas o tambores por medio, da igual. Pero cuando hay una vida humana en juego (o su dignidad), la norma a aplicar, desde el punto de vista ético, es el máximo bien. Así de sencillo. ¿Qué coincide con una norma occidental de respeto a la libertad sexual? Pues mira qué bien.
Los homosexuales, me parece, no lo tienen mejor por aquellos pagos.
El Renacimiento pasó por alto a las mujeres. Y la Revolución Francesa, también. Cuando hablaban del sufragio universal, se referían sólo a la mitad del universo.
Ah, se me olvidaba: la lapidación no es cultura, así que tampoco multicultura ni multifrutas ni multicines ni ná.
Qurida Noemí, qué alegría tener una interlocutora tan ineligente como tú y en esta hora precisa. Yo estoy escribiendo mi novela ahora, pero siempre es un placer hacer un alto y contestar a tus comentarios.
Agur!
Y no, la Revolución Francesa tampoco. Pero de la Ilustración surge la idea -preciosa- de igualdad de derechos...
Publicar un comentario