En el prefacio a la novela, la autora escribe que "por cada cinco libros que significan sólo trabajo, uno constituye un verdadero placer". (Eso por si alguien cree que escribir no cuesta trabajo). Pero éste libro que el lector se dispone a disfrutar, también fue placer para la autora. Ágatha Christie se burla de los que le dicen que escribir tal o cual cosa debió ser un placer. No: a veces incluso una tortura. Esta narración, en cambio, creció sola; ella afirma "Me parece que yo fui sólo su escriba". Esa conjunción de facilidad y felicidad le parece asombrosa. Y sin empacho afirma que se trata de una de sus mejores novelas.
A mí también es una de las que más me gusta. Con un final desarbolante: se queda uno como navío sin trapo. Touché.
Como dice mi madre, "escribir es muy difícil". Pero hay escritores tocados por la gracia.
Ágatha Christie, "La casa torcida". Barcelona, RBA, 2007 (1948).
La casa torcida
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4 de enero de 2010
Publicado por HLO en 13:52
Etiquetas: Agatha Christie
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2 comentarios:
Hola Herminia, recibe mis saludos y la curiosidad que ha despertado tu blog en mi. Esto como síntoma de interés por leer lo que publicas.
Un abrazo de Año recién estrenado.
Buenos días, me ha gustado mucho esta entrada, porque, como bien dices, esta novela te atrapa hasta el último momento. Es una de los libros imprescindibles de A. Christie. Un saludo y enhorabuena por tu blog.
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