Madame Bonnard

23 de abril de 2010


En realidad debería haber puesto, en lugar de la bañera-zapato, este cuadro de Bonnard, que se cita en la página 9 y también con posterioridad: un cuadro irónicamente situado en una estancia que antes fue cuarto de baño y donde fallecó ahogado un hombre...
"En el lugar que ocupaba una mesa redonda con la superficie pintada había estado la ducha. Bajo el cuadro de madame Bonnard secándose había estado el lavabo y el toallero de bronce con arabescos. En un extremo del cuato de baño había una silla de mimbre para colgar un albornoz de su respaldo. No siempre estaba allí, pero aquella tarde sí" (pág. 35).
La novela me está recordando demasiado a la P.D. James de "Sangre inocente": personajes corrientes en un Londres actual, un crimen lejano que actúa como catalizador de las acciones del presente...

Ruth Rendell, "El agua está espléndida". Barcelona, Urano, 2010.

1 comentarios:

NC dijo...

Pero no escriben juntas ni nada de eso ¿no?